Imagen en primer plano de Sandra Barneda feliz con pintalabios rosa

Sandra Barneda explica por qué prefiere Madrid antes que Barcelona

Sandra Barneda se sincera en una entrevista

Sandra Barneda es una de las caras más conocidas de la televisión española y la gran estrella de Telecinco. Nacida y criada en Barcelona, Barneda ha tenido muchos años para conocer la preciosa capital catalana, hogar de una cultura y una gastronomía muy rica.

Sin embargo, es otra ciudad la que ha conseguido enamorarla y esta es Madrid. La presentadora de 'Así es la vida' se instaló en la capital del país en 1996, cuando la ciudad aún tenía que vivir acontecimientos que marcarían al presente, y hoy en día es el lugar al que ella llama hogar.

Con el paso de los años, Sandra Barneda ha ido descubriendo todos los rincones de Madrid, desde los más tradicionales hasta los más estrambóticos, y en la actualidad puede afirmar que realmente es una amante de la ciudad.

Sandra Barneda: la ciudad de su corazón

En una entrevista reciente para ABC, Barneda no titubeó en responder lo que esta ciudad significa para ella porque no solo es su lugar de trabajo, sino que también es su día a día, donde ha creado una vida y una historia digna de contar.

Sandra Barneda habló de una forma muy natural y desenfadada, asegurando que le encanta el «espíritu de hermandad» al llegar a un bar madrileño.

Primer plano de Sandra Barneda emocionada en 'Así es la vida'
Sandra Barneda cambió su vida por completo en 1996 | Mediaset

Un nuevo hogar

Barneda, amante del arte y la espontaneidad, ha encontrado la combinación perfecta en las callejuelas de la capital: «Hay arte en cada esquina. Es esa sensación de salir a pasear y no saber qué te vas a encontrar por la calle», afirma.

La tertuliana destaca que en Madrid hay un gran espíritu de vivir en la calle y que  «acoge sin conocer». «A mí me acogió y me quiso», recuerda en sus primeros días.

El paso de Barcelona a Madrid

Sandra Barneda se mudó a la capital del país a los 21 años, pero antes había vivido en Barcelona, una ciudad bastante distinta al Madrid de aquel entonces.

Sin embargo, los años pasan y las cosas cambian, para bien o para mal. En el caso de Madrid, fue un cambio muy positivo: «Al principio, la sensación era de que no era una ciudad moderna. Yo venía del cosmopolitismo de Barcelona y lo que veía era una ciudad, con perdón, castellana. No tenía en cuenta el diseño, ni los escaparates», asegura.

«He visto el proyecto de Chamartín, y Madrid no quiere parar de mejorar. Es una urbe inquieta, en movimiento. Madrid siempre ha sido libre, y es desde la libertad donde surgen las mejores cosas», remarca la conductora de Telecinco.