Estatua de Felipe IV

Historia y estructura de la Plaza Oriente de Madrid

Esta plaza rectangular es una de las más conocidas de la ciudad madrileña

Esta plaza tiene una plaza rectangular y está situada en el centro de la capital española. Está localizada en el lado oriental del Palacio Real, de ahí su nombre.

Historia del lugar

Antes de que se construyera este lugar, ahí se encontraba un teatro construido por algunos actores en el siglo XVIII. No obstante, este edificio fue demolido debido a su mal estado aunque ese no fue el único edificio que fue destruido en esa zona. Para construir la plaza que actualmente conocemos como Plaza de Oriente, se derribaron varios edificios de esa área.

Aunque la plaza se terminó en el año 1844 durante el reinado de Isabel II, su construcción se inició a principios del siglo XIX, bajo el mandato del hermano de Napoleón Bonaparte, José Bonaparte, también conocido como Pepe Botella debido a su gran afición por la bebida. Este rey gobernó España entre los años 1808 y 1813. Respecto a su diseño, fue creado por el arquitecto Narciso Pascual y Colomer.

De hecho, para corroborar esta historia, solo hace falta leer la inscripción en la placa que podemos encontrar en el suelo de la plaza, accediendo a ella por la calle Lepanto, en la cual pone: “Esta plaza fue creada por orden de José I, el rey Plazuelas, en 1809, tras la demolición de varios edificios del Palacio Real. Narciso Pascual y Colomer fue su arquitecto”.

¿Qué podemos encontrar en esta plaza?

En la plaza y sus alrededores podemos encontrar tres jardines; el del cabo Noval, el de Oriente y el de Lepanto. También podemos encontrar dos hileras de diez estatuas cada una, que representan a antiguos reyes españoles. A esta plaza también la rodean otras atracciones turísticas como el Palacio Real, la Catedral de la Almudena y el Teatro Real.

Estatua ecuestre de Felipe IV
La estatua ecuestre de Felipe IV es uno de los monumentos que podemos encontrar en la plaza | Getty Images

No obstante, la parte más icónica de la zona, la encontramos en el centro de la plaza, donde podemos observar una estatua de Felipe IV. Este monumento fue encargado por el mismo Felipe IV, ya que quería ser recordado en el futuro. Fue terminada en 1606 y se colocó en primera instancia en el Palacio del Buen Retiro, conocido actualmente como el Palacio del Retiro. No fue hasta el año 1843 que esta estatua cambió de ubicación hasta la Plaza de Oriente, donde la podemos encontrar actualmente.

Un dato curioso sobre este monumento es que, aunque fue construido por Pietro Tacca, este pidió consejo a Galileo Galilei debido a la dificultad de su diseño, ya que el caballo sobre el que cabalga Felipe estaba solamente sostenido sobre dos patas. Finalmente, para que la estructura se mantuviera firme, se construyó la parte trasera de bronce macizo y la parte delantera con un bronce más fino.

Las últimas modificaciones de este lugar fueron llevadas a cabo durante la última década del siglo XX. Durante esas obras se construyó un párquing subterráneo.