Montaje con una oficina de trabajo en Cataluña y un círculo con una imagen de unas oficinas

La novedad de la que podrán beneficiarse los parados catalanes y acaban de anunciar

La Generalitat de Cataluña acaba de anunciar que los desempleados contarán con un tutor personalizado a partir del mes de febrero

Novedad para los desempleados en Cataluña. En febrero, las oficinas del Servei d'Ocupació de Catalunya (SOC) contarán con un tutor personalizado, destinado a aquellas personas que no consiguen encontrar un trabajo. Así lo han informado desde el Departament de Treball de la Generalitat de Cataluña, estimando que la medida empiece a aplicarse hacia finales del mes que viene.

Actualmente, Cataluña cuenta con 343.381 desempleados, según datos del Ministerio de Trabajo y Economía Social. Se trata de la cifra más baja desde 2007, pero aún son muchas las personas que no consiguen trabajar. En este sentido, todas las que deseen el asesoramiento del tutor personalizado deberán estar apuntadas en las oficinas del paro como demandantes de empleo.

A partir de ahí, el tutor adjudicado hará un seguimiento de su perfil para saber cuáles son los trabajos que más se adaptan a sus competencias. De esta manera tampoco será preciso revisar el expediente cada vez que acudan presencialmente a una oficina del paro. Una reconversión que pretende mediar entre empresas y personas paradas.

Se aumentará la plantilla y se invertirán 55 millones de euros

Para poder hacer frente a este reto se aumentará la plantilla de trabajadores del SOC (Servei d'Ocupació de Catalunya) en 230 nuevos empleados. En total habrá un orientador laboral para cada 340 desempleados. Lo que tampoco será una tarea nada fácil. Para hacer frente a este nuevo reto se destinarán 55 millones de euros.

Una medida que ha apoyado satisfactoriamente el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès. “El Servei d'Ocupació de Catalunya inicia una nueva etapa que dará más fuerza a este organismo y que tiene la concertación y el trabajo con el territorio como seña de identidad”.

La administración catalana cuenta con más de 60.000 vacantes que pretenden adaptarse a las realidades de cada persona en situación vulnerable. Muchos de estos derechos parten de la nueva ley aprobada por el Gobierno durante la pasada legislatura.